¿Para proteger y servir? Reflexiones sobre la policía.

Charla-debate: ¿PARA PROTEGER Y SERVIR? Reflexiones sobre la policía. Sábado 22 de diciembre, 18h. Loca Anarquista Magdalena

 

charla policía final from local magdalena on Vimeo.

 

Resumen de las intervenciones que tuvieron lugar durante el referido debate, tras la charla de dos compañerxs.

 

  • Comienza con una pregunta ¿Se puede llegar a dialogar con la policía?

 

  • No, sólo si dejan de serlo

 

  • Se habla de la lucha actual dentro de la policía, de hacer distinciones. Que no todos los policías son de ultraderecha y que no es lo más eficiente enfrentarse a ellos.

 

  • El problema no son los individuos, es la institución en sí ( con armas, autoridad). La propia policía es la que agrava los problemas, los crea.

 

  • ¿Se podría crear una comisión ciudadana que acompañe a lxs detenidxs a las comisarías?

 

  • Ya existe una organización que se dedica a ello pero tienen que superar multitud de trámites burocráticos. Si ya existen profesionales y no pueden, es complicado pensar que una comisión ciudadana pudiera lograrlo.

 

  • No se entiende el porqué del objeto del debate. No se entiende el plano legalista, estamos para hacer la revolución. En Grecia la policía está con el pueblo, va a pasar lo mismo y no se va a poder controlar. Todxs están saliendo a la calle, funcionarixs, médicxs… No se entiende hablar de la policía en abstracto. Se necesita organizar, trabajar con toda la gente que está luchando ahora.

 

  • Mejor hablar de la policía, centrar el debate. ¿Si la policía es el brazo armado del Estado, como puede estar en contra? Este es uno de los razonamientos que ha impulsado el debate. Será siempre el brazo ejecutor  ¿Cómo podemos aceptar esa autoridad? Da igual quien gobierne. La policía griega no es parte del pueblo, al igual que la española, y no puede serlo porque es la ejecutora de lo que el gobierno la dicta. Si se movilizan es porque no cobran o cobran menos.

 

  • Si la policía protege al Gobierno, centrémonos en él, en los políticos y pasemos de ellos.

 

  • Hay que cuestionarse la propia existencia de la policía. No están con nosotrxs, son mercenarios.

 

  • Luchar contra el Gobierno es luchar contra la policía, y al revés.

 

  • Hay que plantearse el sentido de la policía, de su existencia misma. ¿Para qué sirve? ¿Previene los delitos? No, sólo para reprimir y castigar. Más policía  no significa más seguridad.

 

  • No vale para solucionar los problemas, no están para ello. Imaginemos el caso de un problema concreto, la droga en un barrio. Sólo hay dos vías para solucionarlo; reprimir al que vende o “quitar la droga”. Pero no se quiere poner fin al problema, no pueden hacerlo. Su función es sólo mantener el orden. Se debate acerca de la policía porque es lo visible, aunque es un elemento más de la columna.

 

  • La clave es el Gobierno. La gente se mete a policía porque no tiene que comer. Dentro de la policía no todos son igual, hay algunos que se han negado a participar en los desahucios.

 

  • No hay buenxs y malxs, hay gente que tiene necesidades.

 

  • ¿ Por dinero todo vale? Paso hambre y curro para reprimir a gente que la pasa también

 

  • Yo por mucho hambre que pase nunca voy a currar pegando a nadie

 

  • Lxs macarras y fachas del barrio son los que se meten a policía. La confrontación no sólo se da en las manifestaciones, sino en el día a día. La única solución es ellos con armas o todxs con armas.

 

  • Aunque tuviésemos armas ellos siempre irían por delante.

 

  • No vale como excusa el hambre para meterse a madero. Entrar en la policía es posicionarse con el Estado y ejercer su violencia.

 

  • Reflexionando en otros momentos sobre la policía y en vista a lo que suele suceder al final de las manis, me planteo hasta qué punto puede paralizar las luchas el centrarse en ellos.

 

  • No hay que centrarse en ellos, el tablero de juego es más grande.

 

  • Sobre la cuestión de la policía como clase trabajadora, la propia Constitución reconoce que los policías no son trabajadores (no tienen derecho a huelga). La policía es el brazo ejecutor del Gobierno. En Grecia la policía vota en colegios electorales distintos y por ello pueden aislarse los resultados, el 60% ha votado en las últimas elecciones a Amanecer Dorado, un partido nazi mientras que en total han obtenido el 8% de votos.

 

  • Respecto a lo que se hablaba de actuar o emplear la violencia, al enfrentamiento con la policía al acabar una manifestación. Opino que es darles argumentos para criminalizarnos. La gente no se va a dar cuenta de un día para otro que la policía es un ente represor. Pero ellos nos tienen miedo.

 

  • Han conseguido que interioricemos que no podemos enfrentarnos a ellos. Todxs tenemos sumido que hemos de obedecer y lo hacemos, sin cuestionarles

 

  • Es cierto que en un plano de igualdad se podría llegar a generar una empatía. Un ejemplo, si estuviese en un hospital y mi compañerx de habitación me cuenta su situación, ambos estamxs jodidxs, yo no sé que es policía, pues podría llegar a empatizar con él o ella. Pero esa igualdad acaba en cuanto sale de la habitación y su trabajo es reprimirme. Se pasa al otro lado de la barrera y hay que empezar a evidenciar esa barrera. Ejecutar las leyes es pasar al otro lado y generar más miseria.

 

  • Se trata de romper el monopolio de la violencia y hacérselo ver al pueblo. No es tan complicado enfrentarse a ellos.

 

  • Cualquiera que trabaje está al servicio del orden, no sólo los policías. Es de curas ese razonamiento de buenxs y malxs. La cuestión es el Estado y me da pena que no haya una organización del pueblo para enfrentarlo.

 

  • Se está hablando de guerra de clases. Hay dos lados, la policía agrava la miseria de lxs explotadxs. Esto es un problema de conciencia, hay que hablar de la policía no sólo como obstáculo sino también como eslabón al principio de la cadena. Si no somos capaces de autogestionarnos sin depender del paternalismo y de un elemento de autoridad seguiremos en el mismo punto. Por encima de nosotrxs está la policía y por eso cuestionar la policía es cuestionar el Estado. Es una excusa para hablar del todo.

 

  • ¿Qué hacemos entonces para destruir el Estado?

 

  • Hechos, no palabras

 

  • Hay mil cosas más que las manifestaciones, boikot, sabotajes…

 

  • La historia ha demostrado que se puede conseguir sin emplear la violencia, se pone el ejemplo de Gandhi. Si empleamos la violencia todxs somos iguales, nos ponemos a su nivel. Se me ocurre por ejemplo utilizar otras armas, como el silencio, manifestaciones en silencio podrían ser mucho más llamativas.

 

  • Todxs somos culpables

 

  • Más que culpa es responsabilidad, yo no soy culpable de la miseria de este mundo

 

  • Me preocupa, de cara a lo que hablábamos de que se interiorice a la policía como enemigo, su lavado de imagen. Por ejemplo que el discurso del SUP haya calado este verano, la gente les ha llegado a apoyar. Me preocupa como desmontarlo, cómo hacer para atacarlo

 

  • A la luz de lo escucho pareciera que estamos ante un estado prerrevolucionario, pero yo pienso que es prerreaccionario. Las luchas recientes, de sanidad, educación, funcionarixs… son peticiones de más Estado, son quejas de grandes privilegiadxs.

 

  • Cada vez hay más sectores a favor de la policía y del orden. De ahí los casos de las últimas luchas contra los recortes, se está pidiendo volver al sistema y recuperar la tranquilidad. Mucha gente está empezando a interiorizar la figura del policía y pasar al otro lado. Hay que trabajar más para impedirlo, aumentar la propaganda sobre lo que hacen.

 

  • Hay que empeorar la imagen de la policía, visibilizando por ejemplo hechos como redadas en los barrios

 

  • Mucha gente está pasando al otro lado porque se ha generado una alarma social. Se ha interiorizado la criminalización. Por ejemplo haces una pintada y te denuncian porque sienten que es un ataque y esa es su defensa.

 

  • Me interesa no sólo hablar de la función represora de la policía, también de la recaudatoria. Las multas los financian y nosotrxs podemos no pagar o “no tener nada” para eludir el pago. Buscar medios para luchar contra la institución

 

  • Hay que lograr el efecto contagio para deslegitimarles. Crear lazos en los barrios que hagan que el Estado allí se debilite, actuar a diario, no sólo salir en las grandes manifestaciones

 

  • También me preocupa la labor que desempeña la policía en los colegios, como referentes de ciudadanía, de policía buena

 

  • Habría que trabajar la insumisión a las penas multa pero no sólo actuar cuando ya nos han multado sino también cuidarnos antes. Por ejemplo negándonos a identificarnos y e ir cuestionando su autoridad